Foto: Francesco Gallarotti.
La primera vez que enseñé el Programa de Reducción del Estrés basado en Mindfulness (MBSR por su sigla en inglés), invité a los participantes a compartir su experiencia. Concretamente, los invité a que escribieran sobre algún aspecto del programa que les había resultado valioso; alguna práctica que habían aprendido e incorporado a la vida cotidiana; o algo que les hubiera gustado saber del programa antes de inscribirse, cuando estaban considerando hacerlo.
Después de tan sólo ocho semanas, era palpable la profunda transformación que había ocurrido en la vida de muchas personas y, sin embargo, era difícil ponerlo en palabras. Por suerte, varios aceptaron la invitación y encontraron la manera de hacerlo. Eso fue a mediados del 2016. Desde entonces, al finalizar cada curso extendí la misma invitación, sabiendo que algún día encontraría la manera de compartir esos testimonios con el resto del mundo. Ese día finalmente llegó hoy, cuatro años y veinte cursos después.
Para aquellos que participaron de este proyecto, nuevamente, muchísimas gracias. Ojalá que al releer lo que escribieron al terminar el curso, les resulte familiar, algo que de alguna manera ya forma parte de sus vidas. Para aquellos que hicieron el curso, ojalá que, al leer los testimonios de sus compañeros, se sientan identificados con el poder transformador de esta práctica. Y para aquellos que no hicieron el curso, ojalá que, al leer estos testimonios, consideren la posibilidad de hacerlo.
Cada testimonio es, por definición, único, pero en conjunto creo que muestran la potencialidad de este programa. Para verlos, visitar esta página.